domingo, 28 de noviembre de 2010

Infeliz

-Sam-dijo Adam buscando mi atención- tierra llamando a Sam.
Me encontraba sentada en una banca del parque viendo como, Daniel se reía con sus amigos y… stephanie.
-Sam- grito Adam ya desesperado por mi falta de atención.
-que-le grite –quieres-dije con un tono de voz apropiado notando que lo había herido.
-te quería dar una regalo pero si estas así de enojada con migo, me voy-dijo mientras se levantaba de la banca y daba unos pasos con lentitud añorando que le suplicara regresar.
Pero yo no quería que el regresara, Daniel no podía salir de mi mente todo me recordaba a el; y ya faltando solo unas cuantas semanas para el baile de “Otoño”, nunca me habían gustado esos bailes, pero la idea de ir con el chico que… amaba me hacía sentir de una forma tan inexplicable.
Adam se encontraba charlando con una chica de su clase de Francés, Daniel se encontraba en una banca del parque con su brazo extendido sobre el hombro de stephanie; por dentro moría de celos pero, el necesitaba ser feliz y su felicidad estaba en stephanie.
Daniel parecía estar un poco distraído, parecía buscar a alguien. Daniel encontró lo que buscaba, me buscaba a mi… nuestras miradas chocaron por unos segundos pero stephanie me hiso un gran favor al hablarle a Daniel y sacarnos de ese trance en el que nos encontrábamos. Mientras eso Adam se encontraba atrás de mi, colocando en mi cuello una bella cadena de plata, con un dije de color esmeralda, parecía ser un corazón.
Adam cubrió mis ojos pensando que no había notado que me había puesto esa hermosa cadena con la mayor delicadeza, con la intención de sorprenderme al no haberlo llamado a que se sentara conmigo.
-sorpresa-grito a mis espaldas haciéndome estremecer, a la vez me daba un dulce y pequeño beso en los labios, ese beso fue lo peor que me pudo haber sucedido y no porque fuera un mal beso, sino porque ese beso lo presencio Daniel que justamente se volteo para observarme y ver esta catástrofe.
Aparte a Adam de mis labios, disimulándolo con un abrazo; yo observaba la cara de Daniel que al parecer estaba llena de sufrimiento. Pensé en levantarme e ir a abrazarlo, pero él y yo ya no éramos nada.  
-¿porque el regalo?- pregunte.
-pues… como ya sabes en unas semana- tomo aire- llega el baile y quería saber ¿si querías- trago saliva- ir al baile conmigo?
Claro tenía que decirlo, lo único que me faltaba ir al estúpido baile con Adam… todas estas estúpidas experiencias me llevaron a un momento retrospectivo.
La bella sonrisa de Daniel, sus hermosos ojos turquesa grisáceos, su bello cabello negro con su toque punk a la moda, pero lo mas bello era como sus ojos brillaban al verme oal pensar en mi o esa expresión en su rostro que tanto me hacia sonreír. Todas esas beses que desee que esos perfectos labios rosados me besaran una y otra vez hasta sentirme suya, ya no podrían ser.
No sabes cuantas veces e deseado gritarle al mundo lo que siento, que lo amo pero sé que no lo entenderían. Pero sé que me romperías el corazón una y otra vez, haciéndome sufrir de nuevo por tu amor.
-eh… Adam sobre el baile-que le podía decir: Adam si quiero ir al baile pero no contigo es que, escucha todavía muero por Daniel, ¿es eso lo que quería, hacerlo sufrir?-no podre ir, tengo tarea y pues estaré muy ocupada esos días, lo siento.
Adam quedo en blanco el esperaba un si, y ya me esperaba la avlancha de preguntas o sugerencias: ¿quieres que te ayude con tus tareas? ¿Qué Tareas Tienes? Y cosas por ese estilo.
-está bien pero al menos dame un beso-claro lo dijo de nuevo no lo soportaba no deseaba darle un beso… yo no lo amo.
Yo no me notaba emocionada por un beso con mi mejor amigo. Pero debía mentir, aunque hubo algo que exploto cuando Adam se acercaba a mis labios.
-¡Adam ya para! Yo no te amo aun amo a…-pause porque note que esa explosión de mis sentimientos fue muy inesperada.
Adam retrocedía a la vez que trababa de decir “calma ya todo está bien” mientras el me gritaba enfrente de toda la gente presente en el parque:
-ya lo sabía, aun amas a ese tarado de Daniel… tu muy bien sabes que el solo te hace sufrir-claro mi mayor secreto revelado, aunque no todo está mal, Adam hiso todo el trabajo por mi, bueno no todo al menos el que más me avergonzaba. Pero ahora es mi turno de hacer lo mas complicado hablar con Daniel.
Daniel estaba pasmado mirándome como si pudiera ver sus pensamientos atravez de sus ojos diciendo “aun me amas” como si estuviera muy sorprendido por lo que desgraciadamente escucho.
_________________________________________________________________
Pues Q Les Parece? Les Gusto? No?
Recuerden Mientras Mas Comenten Mas Rapido Publico!

2 comentarios:

  1. Hola! Concurso de RElatos Cortos de Navidad. Pasaos si quereis participar: http://love-is-louder.blogspot.com/2010/12/concurso-de-navidad.html

    Muchas gracias. XoXo

    ResponderEliminar
  2. Mejor tarde que nunca ¿no? Pues soy del blog http://besos-eternos.blogspot.com/, gracias por pasar y me ha gustado lo que lei.
    Un beso! Y feliz finde!!

    ResponderEliminar